Es en la prueba PISA realizada a alumnos de 15 años de 65 países. Argentina salió mejor que en 2006, pero quedó atrás de la mayoría de los países de la región que participaron.
El sistema educativo argentino registró una mejoría respecto de 2006 según el informe del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés), aunque sigue por debajo de varios países de Latinoamérica. Desde el Ministerio de Educación, destacaron el avance, pero reconocieron que hay cuestiones que mejorar.
El estudio, realizado en 2009, evaluó las aptitudes de alumnos 470.000 alumnos de 15 años de 65 países (34 pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) en tres áreas: Lectura, Ciencias y Matemática. “Respecto de la edición 2006, estamos mejor en las tres áreas que PISA evalúa”, sostuvo en diálogo con Clarín.com Eduardo Aragundi, subsecretario de Planeamiento Educativo de la Nación.
La evaluación se realiza cada tres años y en cada edición se da preeminencia a una de las áreas. En esta oportunidad, se puso el foco la Comprensión Lectora de los adolescentes, aspecto en que Argentina subió 24 puntos respecto de 2006 (pasó de 374 a 398). El ministro de Educación, Alberto Sileoni, destacó el avance y dijo que Argentina y Colombia fueron los países que “más crecieron” en el área.
En Matemática la mejora en relación a 2006 fue de siete puntos (pasó de 381 a 388) y en Ciencias de diez (de 391 a 401). Pese al adelanto en las tres áreas, el desempeño global de los estudiantes argentinos quedó por detrás del de alumnos latinoamericanos de Chile, Brasil, Uruguay y México.
Durante la presentación del informe, Sileoni esbozó algunas críticas a la evaluación PISA. Una de ellas es que no contempla que en Argentina "hay once provincias donde hay chicos de esa edad que están cursando el nivel primario y que hay otros que están en la educación de adultos y no en la escuela secundaria regular", como toma en cuenta el examen internacional.
En los resultados disgregados, aquellos alumnos que al momento de la prueba se encontraban cursando el “secundario regular” (los años 10 u 11 de la escolaridad), obtuvieron mejores resultados que los de la muestra total.
Pese a que la performance argentina mejoró respecto de 2006, el país cayó cinco puestos en el ranking global, ya que pasó del 53 al 58. Eso radica en que en la anterior edición habían participado 57 países, y en la de 2009, 65. “Nosotros estamos en apariencia algunos puestos más abajo porque en la nueva edición de PISA entraron ocho países y la mayoría de los nuevos están en los primeros lugares, con lo cual todos los países de América Latina estamos corridos en esa escala”, explicó Aragundi.
Aragundi aclaró, además, que los resultados “no son estrictamente comparables” con los de la edición de PISA del año 2000, porque en esa oportunidad Argentina fue parte un estudio ad hoc, que no es similar a la prueba general de 2009. En esa primera prueba piloto, el país había obtenido mejores resultados. En 2003, no participó de la evaluación.
“La evaluación es mejor que la de 2006, pero no desconocemos que tenemos que mejorar en cuestiones de aprendizaje de los alumnos”, afirmó el funcionario.
Al tope de la tabla se encuentra China, con 556 puntos. La siguen Australia (515), Japón (520), Nueva Zelanda (521), Singapur (526) y Corea del Sur (539). Entre los países europeos, España (puesto 33º) aparece como el de mayor estancamiento.
En la segunda parte de la tabla, en la que aparecen los latinoamericanos, Chile es el mejor posicionado (44º), seguido por Uruguay (47º), México (48º), Colombia (52º), Brasil (53º), Argentina (58º) y Perú (63º).
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