Con un solo objetivo

OJO: este artículo te desvelará una estrategia ultrasecreta y ultraeficaz para conseguir tus objetivos sin sufrir demasiados daños. Por supuesto, se trata de una estrategia única y exclusivamente para mujeres.
Haz clic aquí para descubrir la totalidad de la estratagema (o simplemente para reírte un rato): Soy mujer y quiero saber.

Hola chicas. ¿Lo quieren? Le van a tener. Pero para ello, no se pueden saltar ninguna etapa; no podes pretender que "él" pase directamente donde te lo encontraste a una insinuante cena en casa.
Se trata de estudiar toda una estrategia, por lo que hay que ir con cuidado y no precipitarse.

Aquellas que no han encontrado todavía al hombre de sus sueños, deben empezar por la etapa n° 1.

Para aquellas que se han cruzado con un Brad Pitt cualquiera, pueden pasar directamente a la etapa n° 2, esto evitará que este mes tengas que pagar una millonada de teléfono. ¿Y sabes porqué? Porque te vas a pasar horas hablando de él con tu amiga, en lugar de invertir tu tiempo en actuar.


Desgraciadamente, no siempre se puede elegir el mejor momento para un primer encuentro.
Isabel ha organizado una gran fiesta para celebrar sus 30 años, y aunque no te apetece mucho, te sientes un poco obligada a ir.



Fuiste directamente desde el colegio; ni siquiera has tenido tiempo para pintarte un poco, uu, que te da absolutamente igual: de todas maneras, seguro que estarán los mismos de siempre.
En fin, que con ese ambiente no es que te guste demasiado ir. Bueno, no te vas a quedar mucho tiempo. Y de repente te presentan a un papito. Y la verdad es que no está nada mal: alto, rubio, ... En este momento está hablando con tu amiga. ¿De dónde habrá salido? Nunca lo habías visto antes, y no te importaría nada volverlo a ver.
Ahora te arrepentis de no haber pasado por casa para arreglarte un poco. No te senties a gusto sin haberte cambiado de ropa, no te queda nada del maquillaje de esta mañana, se te ha corrido el rímel, vaya asco. "¿Qué puedo hacer?"

Vaya, vaya, la verdad es que tu amiga podría organizar una nueva fiesta, ¿no? Es curioso, pero hasta ahora nunca te habías dado cuenta de que, en realidad, te encanta la música que ponen.
Bueno, pues ya está. Han organizado otra fiesta la semana que viene ... y sabes que va a ir. Pero, ... ¿qué me voy poner?, ¿qué le voy a decir?, ¿y a a los demás?, ¿se me notará?
Estás hecha un flan y no paras de pensar en eso. ¡Pero ... tranquilízate, que te va a dar algo!


Por fin se quedaron los dos solos. Como nos hemos hecho "coleguitas", no necesitamos la ayuda de ninguna celestina.


No organices nada en tu casa, porque si al final no sale todo como lo esperabas, no tendrás escapatoria. Además te resultará muy complicado mantenerte en esa línea de deseo, de dificultad, de misterio, si conoce tu casa, tu cama, ... Es decir, no vas a poder hacerte la interesante si descubre, por ejemplo, que tienes un osito de peluche encima de la cama.


¿Y qué tal en un restaurante? De acuerdo, siempre y cuando llegado el momento de «¿y si tomamos una última copa?», la tomen en su casa. Así te podrás decidir, con toda libertad, si te quedas o te vas.